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Ana Zaharciuc

Los cinco lenguajes de amor





«El amor no mira con los ojos, sino con el alma»

William Shakespeare

 


Alemán, inglés, francés, chino, italiano, ruso, danés, portugués, español… Una larga lista de idiomas. ¿Cuántos hablas? ¿Con cuántas personas puedes comunicarte y entenderte perfectamente? ¿Qué pasaría si tuviéramos que comunicarnos con una persona que no habla ninguno de los idiomas que dominamos? ¿Podríamos entendernos al 100%? A través de señas y dibujos tal vez podríamos lograr algo, pero sería una misión difícil. Lo mismo pasa con el amor.


Nuestro lenguaje amoroso y el de quienes nos rodean pueden resultar tan distintos como el chino y el español. Gary Chapman, conocido escritor y filósofo, publicó su best seller “Los cinco lenguajes del amor” en el año 1995. Es un libro que cuenta cómo un consejero matrimonial ayuda a salvar cientos de matrimonios acompañando a sus pacientes a descubrir su lenguaje de amor predominante. De estos cinco lenguajes todos tenemos uno o dos que son los que nos definen. No quiere decir que no hablemos los demás, pero no son los indispensables para sentirnos amados.


Hace unos años, asistí a un taller en un congreso de docencia en el cual nos presentaron el tema de los lenguajes del amor aplicados a la enseñanza. Nos explicaban que, si como profesores lográbamos definir el lenguaje predominante de nuestros alumnos, su aprendizaje iba a ser mucho más significativo, ya que se sentirían comprendidos y eso les motivaría a estudiar más y creer en sí mismos.


En el taller nos recomendaron leer el libro del Dr. Chapman. A pesar que es un libro escrito para el amor en el matrimonio, su contenido puede ser aplicado a cualquier relación de nuestras vidas, con nuestros padres, hijos, hermanos, amigos, alumnos, parejas…


Aquí te cuento un poco sobre cada lenguaje y te invito a descubrir el tuyo y reflexionar sobre el de las personas más cercanas en tu vida. Te garantizo que entenderás muchas cosas sobre ti, tu manera de amar y sentirte amado.






#UNO: Palabras de afirmación

Sabemos que las palabras tienen un poder inmenso. Con las palabras podemos construir o destruir, amar o herir. Lo que tal vez no tenemos siempre presente es que para una persona cuyo lenguaje del amor principal son las palabras de afirmación, éstas significan aún más que para cualquier otro.

Una persona con este lenguaje necesita escuchar muy a menudo que hace las cosas bien, que se valora su esfuerzo, su tiempo, su dedicación, el amor y el esmero con el que hace algo. Hay personas para quienes es vital sentir el amor a través de las palabras, palabras positivas llenas de amor, sinceridad y agradecimiento.


¿Cuántas veces algo nos parece bien pero asumimos que si no decimos que está mal el otro sabrá que está bien? No lo asumas. Di siempre lo mucho que te gusta la rica comida que ha preparado alguien para ti, lo orgulloso que estás de las calificaciones de tus hijos, de lo bien que ha hecho el examen tu alumno. Resalta los logros de los demás y no critiques las faltas. Eso puede destruir al otro. Palabras de ánimo, palabras de apoyo, palabras amables. Esas son las que estas personas necesitan escuchar.


#DOS: Tiempo de calidad

Una persona con este lenguaje de amor valorará cada minuto que comparta junto a ti. Estas personas necesitan toda tu atención, nada de estar haciendo otra cosa mientras estén hablando o compartiendo alguna actividad. El requerimiento base de este lenguaje es estar conectados, enfocados en lo que se está compartiendo.

Estas personas no suelen recordar lo que dijiste sino lo que hiciste y también cuánto tiempo compartiste con ellas. Escuchar con atención, mostrar empatía, vivir plenamente el momento.


#TRES: Regalos

Una tarjeta sin necesariamente un motivo en especial, una llamada, un mensaje imprevisto, una sorpresa, una flor, cualquier detalle que demuestre “me importas”, “vi esto y pensé en ti” representa un gran acto de amor para una persona cuyo lenguaje son los regalos. No se trata del dinero invertido en el regalo sino de lo que viene acompañado con el mismo, tu amor.

Las personas a quienes se les iluminan genuinamente los ojos cuando reciben un regalo, lo abren de inmediato y sonríen, se sienten amadas con ese regalo recibido. A estas personas también les encanta regalar, no solamente recibir regalos.


#CUATRO: Actos de servicio

Todo lo que hagas por una persona cuyo lenguaje del amor principal sean los actos de servicio, irá directo a su corazón. Al igual que con los regalos, no se trata de grandes cosas, sino de todo lo que pueda aligerar alguna carga que tenga, algo que nunca le dé tiempo hacer… Muchas veces a las personas con este lenguaje les cuesta pedir ayuda y esperan que tú te des cuenta de que la necesitan sin que te lo pidan. Presta atención.


#CINCO: Toque físico

Aquí hablamos de abrazos, caricias, besos, darle la mano a la pareja... Sentir a la otra persona cerca. La clave para estas personas es abrazar con el alma y ser abrazadas de la misma manera. Es así como se sienten amadas.


Pienso que conocer todo esto nos da herramientas muy valiosas para ser felices, amar y ser amados hablando el mismo idioma. Esto requiere esfuerzo de ambas partes, pero vale la pena. Anímate y lee el libro. Créeme, te abrirá los ojos a muchas cosas.


Con amor,

Ana

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